En este entorno tecnológico con este ritmo tan acelerado, las compañías que adoptan estrategias de propiedad de código se posicionan en mejor lugar por su responsabilidad y organización.

La Propiedad de Código asegura que los desarrolladores toman responsabilidad en procesos específicos de la base de código. Esta cultura de Propiedad de Código se refiere al concepto de asignar responsabilidad, lo que mejora y clarifica los distintos estados del trabajo. Esto incluye, el mantenimiento, actualización y el control de la calidad y “salud” del código según avanza el tiempo.

Es importante fomentar una cultura de propiedad de código en los equipos de varias formas, esto juega un papel crucial en procesos de desarrollo colaborativos.

¡Echemos un ojo a algunos ejemplos!

 

Tipos de Modelo de Propiedad de Código

En la propiedad individual, el desarrollador puede ser el único propietario de una pieza única del puzle, y es el encargado de su mantenimiento y actualizaciones, el propietario de este código tiene un conocimiento completo de este y es el único responsable.

La experiencia de los individuos permite que estos realicen decisiones informadas, identifiquen posibles problemas e implementen mejoras.

Sin embargo, la responsabilidad en algunos casos, puede distribuirse entre varios individuos, como puede ser la propiedad de equipo. En estos casos, los equipos colaboran en tareas diferentes y complejas. Con mejor colaboración entre equipos, motivados por la propiedad del código, es más fácil manejar bases de datos mayores y promover la escalabilidad.

Si un negocio quiere garantizar su efectividad y seguridad durante la propiedad de código, puede implementar un sistema rotacional donde distintas tareas rotan entre varios miembros del equipo. Aun así, este modelo asume que cada persona tiene las mismas habilidades, experiencia y expertise. Por eso la propiedad jerárquica entra en este debate. En cierto sentido, este sistema privilegia una estructura de delegación eficiente, con desarrolladores senior responsables de secciones más amplias y desarrolladores junior responsables de detalles específicos.

Este modelo asegura una buena tutoría durante los pasos complejos y esto significa más oportunidades para la progresión de la carrera del desarrollador.

Los desarrolladores o equipos asumen, en otros casos, la propiedad de componentes empresariales funcionales específicos dentro de un sistema, centrándose por el contrario en módulos técnicos u organización del código. Los propietarios funcionales son responsables de todo el ciclo de vida de las características o funciones empresariales, como la recopilación de requisitos, el diseño, las pruebas de implementación y el mantenimiento continuo.

Las organizaciones con equipos distribuidos por todo el mundo o múltiples centros de desarrollo ganan flexibilidad con un modelo de propiedad geográfica del código. En este enfoque, se asigna a determinados equipos de desarrollo o personas la propiedad de ciertas partes del código base en función de su ubicación física o experiencia regional.

 

El Beneficio de la Propiedad de Código

Uno de los avances primarios de la propiedad de código se encuentra en la habilidad de facilitar respuestas rápidas a los cambios, problemas y peticiones. Estos escenarios son posibles asignando desarrolladores específicos a áreas concretas en la base de código, permitiendo un proceso de desarrollo mucho más ágil.

Cuando los individuos tienen contacto con una cultura de propiedad de código, cultivan un sentido de la responsabilidad y están más implicado en sus trabajos, llevándoles a una mayor calidad del código y mayor cumplimiento de las normas de codificación. Con personas a cargo manejando partes específicas del base de código, será más fácil tener un código limpio, sostenible y eficiente: este compromiso ofrece unos resultados de gran calidad en un sistema eficiente.

Rapidez en la Resolución de Problemas

El modelo de Propiedad de código acelera la identificación de problemas y su resolución. ¿Quieres saber cómo?

Los propietarios del código están muy familiarizados con el código del que son responsables y por eso lo comprenden mejor, es más rápido para ellos identificar posibles problemas o bugs cuando aparezcan. Por ejemplo, los propietarios de código pueden quitar los bugs y solucionar problemas en las áreas asignadas.

La gestión proactiva de la deuda técnica es otra de las ventajas de la propiedad del código, una vez que los desarrolladores priorizan el tiempo para resolver problemas, refactorizar el código y realizar mejoras, reduciendo así la acumulación de deuda técnica.

¿Qué es la deuda técnica?

Bueno, la expresión es una metáfora, debido a su compleja definición. De hecho, no existe una definición única; queda a la interpretación.  “Deuda técnica” es una frase que salió de la mente de Ward Cunningham, uno de los autores del Manifiesto Ágil. En aquel momento, intentaba explicar el concepto a empresarios no técnicos.

Pero si tratamos de acceder a una definición académica, un artículo del Information and Software Technology Journal define la deuda técnica de una manera muy particular: “La deuda técnica describe las consecuencias de las acciones de desarrollo de software que, intencionadamente o no, dan prioridad al valor del cliente y/o a las limitaciones del proyecto, como los plazos de entrega, por encima de consideraciones más técnicas de implementación y diseño (…)”.

 

Empoderamiento de los desarrolladores y la importancia de un entorno colaborativo

Los propietarios del código tienen la autonomía de tomar decisiones relacionadas a su base de código, incluyendo la resolución de problemas. Este empoderamiento asegura la rápidez en la toma de decisiones, especialmente en momentos clave.

La autonomía en la toma de decisiones es una de las condiciones que se refuerzan en la aplicación de la propiedad del código. Esta estrategia de autonomía permite a los desarrolladores a tomar decisiones y opciones que tienen que ver con la arquitectura, el diseño de patrones y las estrategias de resolución de problemas. Esta autonomía mejora la toma de decisiones y la confianza de los desarrolladores,

Sabiendo que son responsables de partes específicas del base de código les motiva a enorgullecerse de su trabajo, llevándolos a una mejor calidad de código y mejora de solución de problemas.

 

Técnicas para Fomentar la Propiedad de Código

Ahora que ya hemos cubierto todos los aspectos importantes, beneficios y dinámicas específicas de la propiedad de código, es hora de que definamos de forma clara como una compañía puede implementar esta metodología.

En primer lugar, establecemos unos límites en la propiedad en distintas secciones de la base del código, así los desarrolladores entenderán mejor sus áreas de influencia y responsabilidad.

Con este acercamiento, la comunicación es clave: fomentando entornos colaborativos donde los desarrolladores comparten información de forma activa, y animar la colaboración cruzada, discuten y tienen reuniones regulares en equipo donde solucionan problemas y comparten ideas.

Además, es fundamental incorporar procesos de incorporación eficaces para los nuevos miembros del equipo y hacer hincapié en la importancia de la propiedad del código, proporcionando documentación exhaustiva, programas de tutoría y sesiones de formación para ayudar a los nuevos miembros a comprender el código base existente y sus responsabilidades.

Al mismo tiempo, la integración de prácticas periódicas de revisión del código por pares no sólo garantiza la calidad del código, sino que también facilita la transferencia de conocimientos, como el fomento de comentarios constructivos durante las revisiones del código.

Por último, no hay que olvidar la flexibilidad y la adaptabilidad. A medida que evoluciona el código base, también debe hacerlo el enfoque de la propiedad del código.

Aceptar los cambios en la tecnología, las metodologías y la composición del equipo garantiza que las estrategias de propiedad del código sigan siendo pertinentes.

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