La frase “legacy software” normalmente reproduce en tu mente una imagen desfasada y sistemas lentos a los que les cuesta seguir el ritmo con las dinámicas demandas de la era digital. Sin embargo, lo quen una vez se consideró el talón de aquiles para muchos negocios ahora emerge como una oportunidad de transformación. El proceso de transición del software legacy arcaico a uno moderno, innovador y un sistema eficiente que no es sólo una actualización, es una reinvención estratégica.

 

El Dilema del Legacy

 

El software de legacy se refiere normalmente a sistemas operativos, aplicaciones o tecnologías desactualizadas. Puede abarcar desde sistemas mainframe y versiones antiguas de sistemas operativos hasta aplicaciones de software desarrolladas con lenguajes o metodologías de programación obsoletas.

Sin embargo, a pesar de su importancia histórica y de la estabilidad que ofrecía en el pasado, el software heredado a menudo resulta difícil de mantener, actualizar o integrar con tecnologías más recientes debido a su arquitectura, código base o pila tecnológica obsoletos. Estos sistemas suelen ser menos flexibles, propensos a vulnerabilidades de seguridad e incompatibles con las integraciones modernas.

Para los negocios, la decisión de transformar estos sistemas no es únicamente para cambiar las antiguos por los nuevos, se trata de aprovechar la base que proporcionan estos sistemas y reconstruirlos para satisfacer las necesidades contemporáneas.

 

La necesidad de transformación

 

En el mercado hipercompetitivo actual, la agilidad, la escalabilidad y la capacidad de respuesta son primordiales, y las empresas que no consiguen adaptarse a los nuevos tiempos suelen quedarse atrás.

La transformación del legacy software permite a las organizaciones solucionar puntos cruciales como la ineficiencia, falta de integración y problemas de seguridad. Abre nuevas posibilidades para que las compañías innoven y se expandan, agilizando las operaciones y permitiendo la integración de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial (IA), la computación en la nube y el Internet de las cosas (IoT).

 

El proceso de transformación: Servicios de modernización de software heredado

 

Evaluación: La transformación del software heredado es un proceso polifacético que implica una evaluación exhaustiva del sistema existente, la comprensión de los requisitos empresariales y el trazado de un plan estratégico para evolucionar.

Planificación estratégica: Tras esta evaluación, se formula un plan estratégico para guiar la transformación. A menudo, este plan implica decidir cuál es el mejor enfoque para la modernización: una revisión completa, actualizaciones graduales o una estrategia de migración por fases de los sistemas heredados.

Migración e integración: El proceso de transformación propiamente dicho puede incluir varias estrategias, en función de la complejidad del sistema heredado. Puede consistir en una “re-platforming“, es decir, migrar el sistema a un nuevo entorno sin cambiar su funcionalidad básica. El realojamiento podría implicar trasladar el sistema existente a una nueva plataforma o infraestructura. La recodificación, por otro lado, puede requerir reescribir partes específicas del software para adaptarlo a nuevos estándares, lenguajes o arquitecturas. En algunos casos, puede ser necesaria una re-arquitectura completa para rediseñar el sistema desde cero.

Control de calidad y testeo:  Por último, a lo largo del proceso de transformación, son cruciales las pruebas exhaustivas, el control de calidad y de riesgos. Así se garantiza que el software recién transformado cumpla las normas de rendimiento exigidas, sea seguro y se ajuste a los objetivos de la empresa.

 

Los beneficios de la transformación del Software legacy

 

Desde mejoras en el rendimiento y la escalabilidad a mayor seguridad y menores costes de mantenimiento, las ventajas de esta transformación son innumerables. Lo más importante de todo esto, posiciona y adapta rápidamente a las compañías a cambios en el mercado y las necesidades del cliente.

• Rendimiento: Los sistemas más modernos normalmente presentan una mejor velocidad, fiabilidad y eficiencia en comparación con el software legacy, llevándolos a una mejora en la productividad y agilizar las operaciones.
• Seguridad: Mejorar sistemas antiguos mitigan los riesgos en la seguridad, implementando los últimos protocolos y protecciones, protegiendo el sistema frente a varias vulnerabilidades.
• Adaptabilidad: Los nuevos sistemas pueden integrarse fácilmente con las nuevas tecnologías, permitiendo mejores adaptaciones para todos esos negocios con necesidades cambiantes, lo que permite una escalabilidad sin fisuras.
• Agilidad empresarial: la transformación permite respuestas rápidas a los cambios del mercado y las necesidades del cliente, permitiendo cambios rápidos e innovaciones, mejorando la competitividad.
• Experiencia del Usuario: Las mejoras en las interfaces del usuario y sus funcionalidades resultan en una mejor experiencia tanto para los empleados como para los usuarios, mejorando su satisfacción y el engagement.

 

Historias de éxito

Varias compañías han acogido este cambio y han disfrutado de sus beneficios. Por ejemplo, las instituciones financieras que han pasado de sistemas anticuados a otros más modernos y flexibles han experimentado un aumento de la velocidad de las transacciones, una reducción de los errores y una mejora de la satisfacción del cliente. Del mismo modo, las empresas manufactureras han racionalizado sus procesos, lo que se ha traducido en una mayor productividad y un menor tiempo de inactividad.

Todo es mirar hacia el futuro…

Según avanza la tecnología, la necesidad de adaptarse se convierte en algo imperativo. Los negocios que acogen la transformación del legacy software están mejor posicionados para navegar este entorno cambiante, aprovechando el poder de la tecnología para impulsar el éxito. ¿A qué estás esperando? ¡Habla con nosotros y empecemos!